Como a nadie le gusta aceptar sus errores comenzamos a señalar y a buscar culpables de la situación en que se encuentra nuestra sociedad, indiscriminadamente criticamos a quienes quieren desarrollo, progreso, desmotivándolos, destruyendo y no aportando¡ si no más que burlas! Si solo un momento nos pusiéramos a reflexionar ¡estamos nosotros contribuyendo a la marcha de una “sociedad perfecta” (entonces sale alguien diciendo: eso es posible la perfección no existe…) no se da cuenta, continuando; donde impere la honestidad, la equidad, la libertad, a veces peleamos tanto por nuestros derechos obviando nuestros deberes ¡qué ironía!, es hora de mirar de no pensar solo en nuestro presente se nos olvida que vienen sucesores, nuestros propios hijos y qué futuro le ofrecemos seguramente inseguro (recalcó).
Donde están los valores, donde las raíces pisoteadas no las dejamos retoñar, brutalmente con el pasar del tiempo asesinamos sin darnos cuenta ¡no busquemos, culpables antes de hacerlo miremos en un espejo, para ver el monstruo devastador que reflejamos, estamos acabando con todo, la búsqueda es otra.
Se nos ha olvidado de dónde venimos, quienes somos sin importar que seremos, pero lo más triste del caso es que será de nuestros descendientes, es lamentable mirar el horizonte y un sueño se transforma en la más sangrienta pesadilla o solo en una utopía.
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